Hoy 12 de octubre se celebra el día de la Confraternidad Universal y el
nonagésimo primer aniversario (XCI) de la fundación de la U.H.A.O ( Unión
Hispano-América Oceánica ) cuyo propósito es la unidad de todos los pueblos de
América (desde México hasta la Protagoniza pasando por todas las Islas del
Caribe) donde seamos realmente UN SOLO PUEBLO en el cual no existan las
fronteras y todos estemos unidos como hermanos que somos.
A continuación un fragmento de la Conferencia sustentada por el Secretario
General Joaquín Trincado el domingo 9 de octubre de 1927 sobre el tema:
"HISPANOAMERICANISMO" SE IMPONE DECIR "AMERICA PARA LOS AMERICANOS" O AMERICA
PARA LA HUMANIDAD ¿TODOS PARA UNO O TODOS PARA TODOS? "......La Unión
Hispano-Américo Oceánica no envuelve ningún misterio, ni idea secreta, porque no
persigue, amonorar ningún poder a ningún estado ni busca prepotencia; pero sí el
respeto honrado a que es acreedora en toda ley humana y natural; respeto que
exije a los que no sean capaces de amar desinteresadamente, por lo cual jura
declarando "Que cualquier ofensa, de cualquier especie, que cualquiera infiera a
uno de nuestros estados, es hecha a todos juntos". Lo que creemos sea un freno
eficiente a los que por cualquier imaginativo derecho de su fuerza bruta ó de su
ambición, ofende sin miramiento, sonriendo luego de su hazaña y demostrando toda
su moral.
Más ¡Argentinos! ¡Fuertes del Sur! Tenéis grandes deberes que cumplir, que no
habéis cumplido, porque os encontrabais sin un compromiso escrito. Los
políticos, no tuvieron tiempo de meditar que el compromiso más sagrado es el de
hermanos, y esperamos que, ahora cumpliréis con vuestro deber de mayores.
Es hora de que la Unión, por su Tribunal, por su Secretaría General diga al
tutor gratuito, que cuesta muy cara su tutoría; y que habiendo llegado a la
mayoría de edad ceda el poder que nadie le dio de intervención en la familia
Hispano-Americana.
Ahí están pendenciando por cuestiones internas e interminables Chile y Perú, y
Bolivia, y Venezuela y hay resquemores entre Panamá y Costa Rica, Cuba y Santo
Domingo abatidos y los CentroAmericanos, se recelan, a pesar de las continuas
injerencias de la fuerza yanqui.
Yo sé, que esos pueblos hermanos están esperando una palabra del pueblo
argentino, al que irían y tomarían como bueno su veredicto y esperan al fin
desesperan y se tienen que someter al arbitro que él solo gana y todos los otros
pierden. Entre tanto, los políticos argentinos, tienen bastante que hacer en
ofenderse mutuamente y obsequian al que los denigra: el Vaticano.
Pero ya no son solo los pueblos, son sus gobiernos que (salvo unos pocos todos
son populares demócratas, amantes dela fraternidad y desean vehementemente esta
Unión-
Es unánime el querer de todos los pueblos hermanos y es en mayoría también los
pueblos de la Tierra que se adhieren y que ansían que se establezca nuestra
Unión, porque, han visto claro que ella es la base verdadera dela Paz Universal,
sin armas, sin recelo, sin menoscabo de nadie y sea el implemento más augusto
para el progreso, porque, en la confianza de hermanos, cada cual en plena
libertad, propiciará donde quiera que se encuentre porque, en los estados de la
Unión, ninguno es extranjero, sin tener que renunciar a su ciudadanía nativa.
No es la Unión Hispano-Américo Oceánica una máquina complicada e ininteligible
del Panamericanismo o la Liga de Naciones, que no se sabe en cada caso si es o
no competente, porque nuestra Unión no es más que un hogar común de una gran
familia, a cuyo (que aquí es el tribunal Permanente) le compete todo lo que es
necesario a la vida, cada día mejor de toda familia.
No puede ser el Tribunal una reunión de caciques odiosos, de politicastros sin
conciencia, ni escondrijos de absurdos religiosos, divisores de la unidad
humana, porque cada pueblo llevará sus cuatro jueces, uno por la intelectualidad
y el derecho; uno por las obras públicas, industrias y producciones totales; uno
por la agricultura, hacienda y comercio en general y otro por el trabajador
mutual de todos los ordenes con lo que están representadas, todas las cosas de
la vida cívico social moral sin que pueda primar en nadie un egoísmo mínimo
personal o nacional porque, están todos los jueces de los otros unionistas que
no pueden pasar desapercibidos en la más pequeña cosa.
Arriba pues la "Unión Hispano-Américo Oceánica" a la que decimos parodiando:
"Firme tu voz; serena tu mirada, que el mundo en pos de ti camina ya, para su
redención y Paz".
Joaquín Trincado. — con Todos
Jesús Morles.
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